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Sí, sabemos lo que estás pensando. Instagram por aquí, Instagram por allá. La red social de la que todo el mundo habla desde hace unos años y la Biblia de los influencers. Pero lo cierto es que, prejuicios aparte y en lo que a nosotros nos concierne, esta red social ha logrado crear una comunidad de viajeros y soñadores sin parangón que traslada a millones de personas al día a los lugares más bellos y remotos de la tierra. Al igual que las personas, algunos países no pueden evitar mostrar su mejor perfil en cada fotografía, independientemente de la cuestionable técnica del ejecutor y por ello han crecido en reputación entre los más acérrimos de esta red social.
Por otro lado, consideramos de vital importancia la concienciación frente a la colosal masificación que algunos lugares ya sufren desde hace un tiempo debido a este fenómeno digital que empuja a las masas cual red de arrastre. Por ello, animamos siempre a nuestros viajeros y lectores a que viajen. Que viajen a todos esos bellos países que Internet ha puesto a nuestro alcance sin olvidar que lo verdaderamente esencial es la experiencia de inmersión en la cultura de destino, el descubrimiento de pequeños rincones inesperados, esa sonrisa sincera de un desconocido al otro lado del mundo y el atesoramiento de recuerdos verdaderamente únicos que no se vean inevitablemente encadenados a esa insignia sobreexplotada.
Dicho esto, nos lanzamos a hablaros de los destinos más amables frente al objetivo:

Canadá, naturaleza en su estado más puro

La perfecta definición de naturaleza salvaje. Y quién mejor que la propia naturaleza para presentarse ante nuestras lentes –tanto las digitales como las biológicas- y mostrarnos de lo que es capaz. Desde las Montañas Rocosas que se alzan imponentes entre los estados de British Columbia y Alberta, y donde podemos encontrar algunos de los más bellos lagos azul turquesa, hasta sus rugosas costas a ambos lados del continente que dan hogar a ballenas jorobadas, orcas, leones marinos y una infinidad de fauna y flora oceánica. Las hordas de turistas puede que ensombrezcan las vistas desde algunos de los principales miradores de este Parque Natural durante las horas punta, pero si decides realizar un Fly & Drive por Canadá, podrás decidir cuándo es el mejor momento para visitar las Rocosas y disfrutar de ellas a tu ritmo, bajo la armoniosa serenidad de los bosques y laderas canadienses.
Un poco más al Norte –es una forma de hablar, ya que Canadá es el segundo país más extenso del mundo- los más aventureros encontrarán las inhóspitas tierras del Yukón y otras regiones más cercanas al Polo Norte, que brindan ahora sí, la oportunidad de sentirse pequeño frente a semejante espectáculo natural.

Cuba, a ritmo de vida

Puede que gran parte del atractivo fotográfico de Cuba, y en especial La Habana, se deba a las decisiones sociales de uno de los personajes más controvertidos de las últimas décadas en el panorama político. Pero lo cierto es que las ajadas fachadas de las infraestructuras cubanas y los numerosos Cadillacs antiguos que circulan por sus calles, combinado con los ritmos callejeros continuos y la simpatía de sus gentes pese a lo sufrido, convierten a esta isla en un continuo festín para los sentidos y el alma.
Tomarse un mojito en la Bodeguita de en Medio, mover el esqueleto al ritmo cubano, pasear al atardecer por el Malecón… Las opciones en La Habana son muchas, pero si lo que queremos es conocer la auténtica Cuba, recomendamos echarnos a la carretera y descubrir la región de Viñales, con sus campos de cultivo y fábricas de puros; sus playas impecables de arena blanca y aguas cristalinas, o bellas ciudades de aspecto colonial como Trinidad, un poco más al sur de La Habana y a pocos minutos del Gran Parque Natural Topes de Collantes. Si quieres sacar partido a tu cámara, Cuba es tu gran aliado.

Japón, tradición y tecnología

Japón está de moda. De esto no cabe duda. Puede que sea la reciente introducción del sushi en el sector hostelero de nuestro país. Puede que sea el monopolio de series infantiles de producción nipona que desde hace años abarrotan el prime time. En cualquier caso, viajar a Japón será una de las mejores decisiones que hayas tomado en tu vida.
Sus coloridos templos asentados en valles y macizos montañosos nos ofrecen un salto al pasado en el que descubrir una nación que ha sabido mantenerse en la cúspide de los avances tecnológicos sin olvidar sus tradiciones más ancestrales. Lugares como Fushimi Inari se han convertido en auténticos iconos del país debido a su aparición en el filme Memorias de una Geisha y la proliferación de fotografías prácticamente idénticas en Instagram y otras redes sociales. Si no quieres verte atrapado en una marea humana, evita las temporadas altas y recuerda que Japón alberga demasiadas bellezas como para obcecarse en una fotografía mientras cientos de personas se aglutinan tras el fotógrafo esperando su turno.

Nueva York, la ciudad de las luces

Por si alguien lo dudaba. Aquí tenemos a Nueva York. ¿Cómo no íbamos a incluir a Nueva York entre los mejores destinos para visitar del mundo? Da igual qué etiqueta le pongamos: La Ciudad más Instagrameable, La Ciudad que Nunca Duerme, La Gran Manzana, El Hollywood del Este o incluso Gotham.
Durante décadas ha sido el lugar al que escapar en busca del éxito tanto si eras músico como actor, periodista, economista, ingeniero, modelo e incluso, como quedó demostrado durante la década de los años 20, un simple expatriado europeo. Puede que en nuestras mentes Nueva York quede simbolizado ineludiblemente a través del Empire State, el puente de Brooklyn o Wall Street pero cualquiera que haya visitado esta asombrosa ciudad coincide en una cosa. La verdadera esencia de Nueva York se encuentra simplemente ahí fuera. En sus largas avenidas delineadas por rascacielos y las apacibles calles de sus barrios residenciales. El bazar asiático junto a la pizzería italiana, que disputa con el ultramarino latino de enfrente el puesto por el mejor aroma del barrio. Los oscuros locales Speak-Easy que nos trasladan a la época de la Ley Seca de los años 20 o los animados clubs que bailan al ritmo del jazz y el blues. No importa quien seas, de dónde vengas o lo que busques. En Nueva York lo encontrarás.

Filipinas, la isla más bella del mundo

Filipinas no suele entrar en este tipo de rankings, pero su gran belleza natural y gran atractivo histórico y cultural nos ha llevado a incluirlo en esta lista de lugares más instagrameables del mundo. Una vez pones los pies en alguna de sus 7107 islas descubres un país donde las playas vírgenes, los arrecifes coralinos, las frondosas colinas, una variada fauna marina y hasta un río subterráneo que nos permite navegar por sus entrañas se convierten en vitales protagonistas.
La isla de Palawan ha sido nombrada en 3 ocasiones como la más bella porción insular de la Tierra, por lo que parece de religiosa obligación la inclusión de este país en este ranking.

Kenia, memorias de África

Las llanuras de África han sido desde tiempo inmemoriales objeto de exploradores y aventureros, que movidos por su singular belleza y riqueza natural han recorrido los vastos parajes de sus territorios más salvajes. Dicen que si alguna vez soñaste con África seguramente lo que pasó por tu cabeza fueron las magníficas estampas que ofrece el principal Parque Natural del país: Masai Mara. Hoy en día realizar un safari por Masai Mara sigue siendo el sueño de miles de personas y parejas alrededor del mundo y por suerte, y especialmente en comparación con algunos destinos asiáticos de moda, continúa conservando la esencia de África, donde su abundante fauna campa a sus anchas por todo el territorio libre de muchedumbres.
Los 5 grandes del continente. Leones, rinocerontes, elefantes, leopardos y búfalos te esperan en Kenia para fardar en Instagram y sobre todo, hacerte sentir partícipe de uno de los mayores espectáculos naturales de la tierra. Pero recuerda, viaja con respeto y sentido común. Los 5 grandes no se llaman así por nada.

Islas Lofoten, en la cima de Europa

Las Islas Lofoten, en Noruega, se encuentran en una de las regiones más septentrionales de Europa. Quizá sus montañas no destaquen por su altura, pero con total seguridad conforman, junto a sus fiordos una de las panorámicas naturales más bellas del continente. Allá donde mires, tus ojos se toparán con la naturaleza más prístina.
Las aguas más calmadas a orillas de pequeñas aldeas pesqueras. Y los valles más espectaculares que jamás hayas visto. Llegar hasta allí requiere de varias escalas y probablemente solo sea una opción en verano para la mayoría de los mortales, lo que reduce las posibilidades de maravillarnos con su esplendor. Pero realmente merece la pena. Prepara la cámara y varias baterías, porque desde el momento en que pises las Islas Lofoten no podrás guardarla en su funda.

Costa Rica

Uno de los países con mayor biodiversidad del mundo. Una población volcada en el cuidado de su naturaleza. Sus frondosas selvas, extensos canales y costas esconden el mayor tesoro de Costa Rica. Tortugas, cocodrilos, jaguares, tapires, aves marinas, pelícanos, osos perezosos, ballenas y un larguísimo etcétera. Los guías que muestran orgullosos sus muchos parques naturales conocen, con precisión de cirujano, los puntos en los que podremos toparnos con la fauna más amigable del país y nos conducirán a través de los verdes bosques tropicales. Si lo tuyo son los viajes de aventura, Costa Rica es uno de los destinos más recomendados para ello.

Australia

Australia puede sacar pecho y presumir de ser uno de los países con más seguidores del mundo en redes sociales. Puede que su gran tamaño ayude, puesto que, aunque quizá no lo parezca a primera vista, podríamos meter toda Europa dentro. Pero hay que admitir que cuentan con tantos símbolos reconocibles que es difícil competir con ellos.
¿Te dice algo el nombre Quokka? Estos simpáticos animalillos han hecho derretirse de amor a famosos como Roger Federer o Chris Hemsworth –Thor- con su sonrisa bobalicona. Por desgracia se encuentran en peligro de extinción y solo está permitido hacerse selfies con ellos siempre y cuando sea el propio animal el que se acerque a nosotros y no le toquemos. Las costas de Byron Bay y Gold Coast son la meca del surf para los amantes del deporte. La orgullosa silueta de la ópera de Sydney. Uluru, la inmensa roca sagrada de Australia. La mayor barrera de coral del mundo. Y por supuesto, los canguros y los koalas. Vayas donde vayas. Tu cámara te pedirá marcha.

Maldivas, el paraíso del océano Índico

El paraíso de los amantes de las playas vírgenes de arena blanca, las aguas cristalinas, el submarinismo y los resorts de lujo. Las Maldivas son la definición de paraíso. En ellas podrás hacer aterrizar tu imaginación para vivir en tus propias carnes lo que siempre soñaste cuando te imaginabas varado en la más bella isla del océano. Tus problemas se evaporarán bajo los rayos del sol y tu cuerpo se relajará ante la suave caricia del Océano Índico. Pero las Maldivas no son solo un lugar donde escapar del mundo. Estas islas también ofrecen lugares perfectos para practicar surf y sentirnos como pez en el agua junto a las cientos de especies que abarrotan sus arrecifes y atolones.

Escocia, con falda y a lo loco

Las llamadas Tierras Altas de Escocia –o Highlands- han sido protagonistas de leyendas y epopeyas. Del amor y el desamor. De aquellos que buscaban encontrarse y los que buscaban desaparecer. Uno de esos lugares que muestran su mejor cara con la peor meteorología. Viajar a Escocia es descubrir una de las culturas más auténticas de Europa, amante del buen whisky y detractora de los pantalones. Sus infinitos páramos y montañas peladas conforman un paisaje maravilloso donde hacer despertar al héroe que llevamos dentro. Un poco más al Norte, se encuentra la Isla de Skye, uno de los lugares más fotografiados del país y sin duda uno los mejores territorios para visitar en Escocia.

Nueva Zelanda, un espectáculo natural

¡Cómo olvidar a nuestras antípodas! La Tierra Media la llaman ya algunos por su gran protagonismo en la saga cinematográfica de El Señor de los Anillos. Más allá de la ficción lo cierto es que Nueva Zelanda cuenta con algunos de los paisajes naturales más espectaculares del planeta, que van desde los fiordos del Sur –considerados por muchos la Octava Maravilla Natural del Mundo- y los glaciares de sus macizos montañosos hasta los infinitos mantos de hierba que cubren las laderas y sirven de alimento a millones de ovejas –que por cierto, superan con creces el número de habitantes humanos del país-. Y es precisamente aquí, en uno de estos campos donde encontramos las pequeñas guaridas de los Hobbits –Hobbiton-, que con mimo y esmero los neozelandeses han sabido conservar tras el rodaje de las películas de Peter Jackson. Si disfrutas de la libertad que proporciona viajar en tu propia autocaravana. No lo pienses más. Este es tu destino perfecto.